Filosofía barata y zapatos de goma... ya perdí la cuenta

Sepan disculpar, pero cinco días tirada panza arriba alternando entre playa y mirar los programas de diseño ingleses esos de cambiar las casas, más OCHO HORAS de combi, más llegar y leer el diario después de casi una semana, de ninguna manera podía ser un buen cóctel.

Quiero compartir con ustedes un fragmento de la obra "Quién, Yo?" de Dalmiro Sáenz.
Para los que no la leyeron (léanla!!!), y contada de un modo suuuuumamente grosero, se trata de un hombre (Felipe Azul de Metileno) que es acusado de robar una suma ínfima con lo cual hasta el fiscal pide la absolución. Pero resulta que a medida que avanza la indagatoria Felipe empieza a meter la pata y confesar una serie de crímenes...

Fiscal: -Usted es un blasfemo! Usted tergiversa todo lo que dice, yo voy a mandarlo a la silla eléctrica, yo voy a pedir al jurado que lo maten, porque usted no merece otra cosa que la muerte, y el jurado no va a tener más consideración que la que tuvo usted con esa chica.

Felipe: -Y al jurado después lo van a matar? Y después van a matar al que mató al jurado? y después al que mató al matador del jurado? Y después... (pensativo) va a ser como la bomba atómica, no va a quedar nadie!

...No les suena a alguna que otra muerte perpetrada en estos días por asesinos sanguinarios que tienen la costumbre de abogarse el poder de decidir sobre la vida y la muerte de la gente mientras proclaman libertad y derechos humanos?
...Sin defender a "naides" eh... que una cosa es que alguien lo merezca y otra muy distinta, que alguien más vaya y lo haga...