Hoy me siento como Alejandro Lerner

Un domingo por la tarde no es un buen momento para que me recuerdes que te importa un carajo mi existencia, opiniones y/o estado anímico, sabelo y manejalo, con mayor delicadeza en lo posible.


BTW, duró menos que nunca el Colonia project. Yo sabía que no lo tenía que quemar. Queda oficialmente confirmado que Colonia NO EXISTE, pero al menos me sirvió para detectar unos cuantos conspiradores más.

El día en que hice todo mal

Salí tarde de casa rumbo a una entrevista laboral.Ergo, me tuve que bajar y tomarme un taxi.
Un taxi para llegar perfectamente a horario... a la dirección equivocada. Listo, ya convenciste a tu probable futura empleadora de que tenés problemitas.
Bien, entonces hay que llamar y corroborar dirección... no traje el teléfono. LLamo a casa, que abran mi mail, no entienden una goma, no lo encuentro, revoleo cosas mientras un policía me observa atentamente. Y, no daba llorar, che, que se me corría el rimmel!!!
Ahora, a llamar y avisar... no tengo más crédito. Estoy parada en Cochabamba y Paseo Colón y no hay un kiosco en ochenta y cinco cuadras a la redonda. El que hay tiene cabinas telefónicas que no andan y no venden tarjetas de teléfono.
A dos cuadras encuentro un teléfono público, llamo, averiguo, obtengo dirección. Otro taxi, más gasto. Al contrario de todo lo demás, la señora cree haberme dado mal la dirección, fiuuuuu.
Durante la entrevista me llaman por oootra entrevista. Cómo la piloteo? Como puedo, después te llamo, gracias, vuelvan pronto!
La entrevista se extiende y yo necesito llegar a mi actual laburo, en lo posible. Salgo, bajo la lluvia pugno por una tarjeta de teléfono, me subo al tercer taxi de la mañana, mientras voy para el laburo llamo a la otra entrevista.
Llego, me abrazo a la pilastra de cosas que me quedaron del día anterior, empiezan a llover otras cosas. Pero las saco con fritas, si hoy estoy como loca!
Me estoy por ir a mis nuevas súper clases de canto y me doy cuenta que no traje los comprobantes de inscripción, mío y de mi amiga Rominí. Como acordé pasarla a buscar, pido que me los manden por remis a la casa de ella que, me entero después, no tiene un centavo encima para recibirlo. Y por supuesto, el buen hombre llega antes que yo.
LLego a la clase y la descerebrada de mi compañerita estrella (y aclaremos el contexto: curso nivel 1, de 8 clases, no hay forma de que no sea meramente recreativo) se compara con María Callas. Ok, estamos todos listos.

La verdad que lo que me salvó el día fue esto:


No me digan que no la rompe, John Esponja!!!

Teoría Conspirativa Paranoica nº....

Para mí que Colonia del Sacramento no existe. Simplemente la inventaron, pegaron unas cuantas personas con mate en una foto de Bahía o algo así y ya, y todas las personas que juran y perjuran que existe son viles conspiradoras. Como en Truman Show, que cada vez que el pobre Truman quería salir lo convencían de que no, le negaban los pasajes de avión o le daban vuelta el botecito.
Fuera de joda, hace como tres novios que quiero ir y no hay caso, siempre algo pasa.
Igual ayer compré los pasajes. Así que esta vez van a tener que hacer algo muy grosso para desviarme de mi objetivo. Yo que ustedes no me subo al Eladia Isabel en unos meses, porque si voy yo me lo van a dar vuelta como un panqueque, o me lo van a frenar en el puerto o algo así.
Después no digan que no les avisé, y no me vengan con que Colonia sí existe porque sólo van a lograr convencerme de que la conspiración es más grande de lo que yo creo. Por las dudas, mientras organizo el "Premio Consuelo Berreta Tour" planeé un par de días en otra localidad oriental como para desorientar... muejejejeje o qué se creen, yo también puedo conspirar.
He dicho

Notas mentales

***La borrachera fomenta el efecto "te quierrrwwooo mussssshho"; recordar no entablar conversaciones con cualquier NN que se cruce estando alcoholizada o terminarás prestándole tu carpa, tu bolsa de dormir y tu vida. Con una sonrisa.***


(qué generosa que soy cuando estoy ebria, por dios)

Una historia de ficción. O no?

Él está convencido de que en realidad no pertenece a la familia que lo crió. No, no puede ser, si salta a la vista que es diferente. Tiene que ser un Anchorena. Eso, un Anchorena, un Alvear, un Álzaga.
Seguramente hubo un error y lo cambiaron en la maternidad. O peor, sus padres verdaderos lo dejaron en una canastita con primorosos encajes en la puerta de una iglesia, o algo así. Quizás su madre no estaba casada, o su padre no lo quiso reconocer. Pero lo que se hereda no se hurta. Él es un Anchorena, de eso no cabe dudas. Se nota en el porte, en la forma de hablar, se nota en lo que dice y en sus convicciones.
Ya lo va a venir a buscar su papá, y juntos se van a ir a tomar unas copas al jockey. O a jugar al golf, o a alentar a La Dolfina, por qué no. Las vacaciones en el Caribe, en Europa, en la Polinesia. Juntos, van a dirigir las empresas familiares. Y bien cortitas que las van a tener a las mucamas.
Mientras tanto, él sigue atrapado en esa familia de clase media rasposa que se limpia su propia casa y come pizza pedida por teléfono. Sintiéndose el cóndor que se crió entre pavos.

Cómo saberlo?

Resulta que ando medio preocupada.
Y como acá en mi blog estuvieron entrando para preguntar cosas como "por qué cuando beso a mi novia me vengo" o "si tengo 8 a los cuantos tendría que tener mi primer beso?" (ambas son textuales), llegué a la conclusión de que internet me iba a dar la respuesta.
Encontré algunas joyitas como "Drogas: Test del Hijo Drogadicto. Test para Padres con Hijos Drogadictos, sepa si su hijo es una persona adicta a cualquier tipo de droga, además el grado de su adicción como la forma de ayudarlo, descubra y ayude a su hijo con este Test para Padres con Hijos Drogadictos". (sigan disfrutando aquí)
Pero no encontré ningún "Test para Hijos con padres Drogadictos". Y mi vieja que no para de cantar esto y esto otro.

Dicen que es pa preocuparse?